En este jueves santo, me desperté muy temprano con unos deseos inmensos de iniciar mi día, instantes de meditación y agradecimiento a mi Padre Dios, a todos los maestros y los seres de luz que nos acompañan, de pronto incesantemente comenzó a repetirse en mí una frase “Todo está bien”, yo continúe en mi tarea, hasta que escuché una voz diferente a la mía: “Diles que todo está bien”.
Así que este mensaje lo escribo con total respeto, tal cual como lo he recibido:
CONFÍA.
“Hay una fuerza superior que sostiene todos los planetas y al universo entero, es la misma fuerza que hoy tienes y te acompaña.
Es una prueba aunque no la comprendas tiene un propósito de amor, para ayudar a los humanos a abandonar las armas, los juicios y el temor, tienes la opción de perderte en el caos que ya existe o comenzar a confiar, de aprender a cuidarte a ti para proteger al resto o aumentar la desesperanza, es el reflejo justo de la existencia de amor, para el despertar del ser que realmente eres, solo puedes servir cuando tu mismo te pones a salvo.
Muchos seres de amor se encuentran en este momento enviando su luz, sirviendo y consolando a todos los hijos del planeta tierra, siente su presencia cuando aquietas el torbellino apresurado de tus miedos, a cada pensamiento de miedo un pensamiento de confianza de amor y certeza, “todo está bien”.
Siempre ha estado bien para el proceso de paz, unidad, cooperación y amor que te trajo a esta existencia. Cada vez que el miedo intente apoderarse de ti, siente nuestra presencia, siente como te abrigamos con nuestra luz amorosa, toma aire profundamente, llena tu mente de luz violeta y repite incansablemente “GRACIAS PADRE TODO ESTÁ BIEN”.
Gloria Arroyave B.